En la búsqueda de la juventud —o por lo menos de una apariencia más juvenil— tanto hombres como mujeres procuran tratamientos para atenuar las líneas de expresión, las patas de gallo y las arrugas de la frente, así como para conseguir labios y mejillas más carnosos. Un tratamiento popular implica inyectarse rellenos dérmicos en el rostro. En estudios aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) sobre rellenos dérmicos, la gente por lo general informa estar satisfecha con los resultados del tratamiento.
Se sienten muy satisfechos con la capacidad de estos dispositivos médicos para mejorar la apariencia de las arrugas o los rasgos faciales (por ejemplo, de los labios o las mejillas) y devolverles una apariencia juvenil.
Pero la Dra. Janette Alexander, M.D., una autoridad médica de la FDA, advierte que es importante conocer los riesgos antes de hacerse el tratamiento.

¿Qué son los rellenos dérmicos y cómo se usan?
Los rellenos dérmicos inyectables son tejidos blandos y rellenos antiarrugas aprobados por la FDA como dispositivos médicos. Generalmente, estos productos se inyectan en la piel para ayudar a rellenar las arrugas del rostro, restaurándole una apariencia más tersa. La Dra. Alexander explica que la mayoría de los rellenos logran un efecto de rellenado o alisado que dura unos seis meses o más en la mayoría de las personas.
La FDA sólo ha aprobado un relleno antiarrugas permanente, el cual contiene microesferas de polimetilmetacrilato. Éstas son pequeñas partículas redondas y suaves de un plástico biológicamente compatible que no es absorbido por el organismo. Este relleno es el único aprobado por la FDA para corregir el tejido facial alrededor de la zona de la boca.
Además, la FDA ha aprobado varios rellenos dérmicos inyectables que son temporales, porque el organismo termina absorbiéndolos. Estos productos se usan para corregir defectos en el tejido blando del rostro, tales como arrugas y pliegues de la piel que van de moderados a severos, aumentar el tamaño de labios y mejillas, y restaurar o corregir los indicios de pérdida de grasa en el rostro en las personas con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). No todos los productos se han aprobado para las indicaciones antes mencionadas.

Estos rellenos temporales incluyen los siguientes ingredientes:

  • Inyecciones de colágeno, a base de colágeno vacuno o humano altamente purificado
  • Ácido hialurónico en gel, un gel lubricante protector que el organismo produce de manera natural
  • Hidroxiapatita de calcio, un mineral y componente importante de los huesos
  • Poliácido láctico (PLA), una sustancia sintética biodegradable y biológicamente compatible

La FDA no ha aprobado los rellenos dérmicos para aumentar el busto o los glúteos, ni para inyectarse en ninguna otra parte que no sea el rostro.
¿Cuáles son los riesgos?
“Como con cualquier intervención médica, inyectarse rellenos dérmicos plantea algunos riesgos”, advierte la Dra. Alexander. “Uno debe preguntar lo que debe esperar y consultar con su profesional de la salud si le preocupa algún efecto secundario en particular”.
Entre los efectos secundarios más comunes están:

  • amoratamiento
  • enrojecimiento
  • hinchazón
  • dolor
  • comezón

Otros efectos secundarios adicionales de los que se informa con menos frecuencia son:

  • infecciones
  • bultos y protuberancias
  • decoloración o cambios en la pigmentación

Algunos riesgos raros, pero graves, incluyen:

  • cicatrices, vista borrosa, pérdida parcial de la vista y ceguera, si el relleno dérmico se inyecta accidentalmente en un vaso sanguíneo; por eso se recomienda que quienes prestan los servicios médicos tengan cuidado de no inyectarlo en vasos sanguíneos (sobre todo alrededor de la zona de la frente, la nariz y los ojos)
  • reacciones alérgicas que pueden devenir en graves (choque anafiláctico) y exigir atención médica de emergencia

La mayoría de los efectos secundarios se presenta poco después de la inyección y desaparecen a las dos semanas, señala la Dra. Alexander. En algunos casos, éstos pueden surgir semanas, meses o años más tarde. Usted no debe usar rellenos antiarrugas si padece:

  • alergias graves marcadas por un historial de choques anafilácticos (la reacción alérgica potencialmente mortal del cuerpo)
  • alergia al colágeno (cuando piense usar rellenos antiarrugas que contienen esta sustancia)
  • alergia a la lidocaína (cuando piense usar rellenos antiarrugas que contienen esta sustancia)
  • una predisposición a producir tejido cicatricial en exceso (queloide) o cicatrices abultadas (hipertróficas)
  • trastornos hemorrágicos
  • enfermedades inflamatorias (quistes, espinillas, sarpullido o urticaria) o infecciones activas; deberá posponer el tratamiento hasta que el padecimiento esté bajo control

Consejos para los consumidores
Antes de decidir inyectarse un relleno dérmico, advierta lo siguiente:

  • La inocuidad de estos productos para su uso en mujeres embarazadas o en estado de lactancia, o en pacientes menores de 18 años de edad, se desconoce.
  • La inocuidad si se usa en combinación con Botox u otras terapias antiarrugas se desconoce.
  • Usted debe poder obtener la etiqueta de información para el paciente sobre los rellenos antiarrugas inyectables aprobados por la FDA de su profesional de la salud.
  • Conozca la clase de producto que se inyectará y todos sus posibles efectos secundarios. Sepa dónde se inyectará cada uno de los productos utilizados.
  • No compre rellenos dérmicos en internet; es posible que sean fraudulentos o dañinos, o que estén contaminados.

También hable acerca de los diferentes tipos de rellenos dérmicos aprobados por la FDA y de los resultados que desea obtener con su profesional de la salud, quien podrá recomendarlo con un dermatólogo o un cirujano plástico, y asegúrese de seleccionar un especialista capacitado para llevar a cabo el procedimiento. (También puede acudir a la Academia Americana de Dermatología, la Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos o la Sociedad Americana de Cirugía Plástica Estética).

¿Y qué hay del Botox?
El Botox Cosmetic y otros productos a base de la toxina botulínica tipo A, tales como el Dysport y el Xeomin, están indicados para el tratamiento de las arrugas y son medicamentos inyectables, pero no rellenos dérmicos. La forma en que funcionan es evitando que los músculos se tensen, de modo que las arrugas no son tan evidentes. La FDA ha aprobado el Botox Cosmetic únicamente para una mejora temporal de la aparición de arrugas en la frente y patas de gallo.

18 comentarios en «Cómo rellenar las arrugas de una manera segura»
  1. d6j1tL What as up to every one, the contents existing at this web site are in fact awesome for people experience, well, keep up the good work fellows.

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