El expresidente ofreció una conferencia en la que indicó que el fanatismo va en contra de los ideales de los Estados Unidos.

El expresidente George W. Bushseñaló que «la intolerancia parece envalentonada» en estos tiempos modernos, advirtió que el país necesita aceptar la «globalización» y rechazar la «supremacía blanca».

Rechazó el «fanatismo» y la «supremacía blanca«, calificándolas como inaceptables.

«La supremacía fanática o blanca en cualquier forma es una blasfemia contra el credo americano», dijo Bush.

Durante su discurso, Bush advirtió que las democracias enfrentan «amenazas nuevas y serias». Los desafíos de la seguridad económica, política y nacional abundan.

Criticó a la «clase gobernante» por alentar este tipo de ideales aunque no mencionó específicamente al presidente Donald Trump, el Congreso o cualquier otro político actual en particular.

Bush también dijo que la confianza de los ciudadanos en las instituciones ha disminuido en estas últimas décadas por diversas causas, como el intento cibernético de Rusia para influir en las elecciones presidenciales de 2016.

El exmandatario considera que el apoyo a la democracia en sí misma ha disminuido.

«Algunos han colaborado a esta desconsolidación demócrata. Simplemente parece una combinación de cansancio, mal genio y olvido. Especialmente en los jóvenes, que nunca experimentaron la claridad de eventos que han dado identidad y fortaleza a la democracia y los valores americanos, como por ejemplo la Guerra Fría«.

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