Hoy en día las mujeres con diabetes o reuma también pueden quedar embarazadas y tener un bebé perfectamente sano. foto: Andrea Warnecke/dpa-tmn

Por Caroline Mayer

Hasta hace pocas décadas era impensable. ¿Tener un bebé a pesar del
reuma? ¿Imaginar un embarazo aunque sea epiléptica, tenga diabetes o
asma? Hoy todo eso ha cambiado. “La obstetricia trabaja muy bien en
cooperación con la especialidad de cada sector y puede generar las
condiciones para avanzar en cuestiones que antes parecían
imposibles”, explica el director de obstetricia de la clínica de
Jena, Ekkehard Schleussner.

Hoy en día las mujeres con diabetes o reuma también pueden quedar embarazadas y tener un bebé perfectamente sano. foto: Andrea Warnecke/dpa-tmn

Más allá de lo que diga la ciencia, a nosotras la primera pregunta
que se nos plantea es: ¿mi cuerpo será capaz de llevar todo esto
adelante? ¿Podré tomar mi medicación durante el embarazo? ¿Qué
riesgos implica? Los médicos coinciden en un aspecto fundamental: lo
más importante para que el embarazo pueda tener un buen desarrollo es
que sea preparado con el cuidado necesario.

Antes de empezar a buscar un embarazo, es importante asesorarse con
el ginecólogo y con el especialista de la enfermedad que uno padece.

Muchas veces uno no tiene menos chances de quedar embarazada y de
tener un bebé sano que otras parejas. En general sólo se recomienda
evitar el embarazo cuando se prevé que eso podría poner en peligro la
vida de la madre.

Todo suena muy bien, pero lo fundamental es saber que tal vez los
”preparativos” lleven algo de tiempo. “Es importante partir de una
situación estable para encarar un embarazo, independientemente de si
uno tiene un problema metabólico, una enfermedad autoinmune,
epilepsia, diabetes o infecciones crónicas”, explica Schleussner.

Además, habrá que tener en cuenta que las embarazadas no pueden
ingerir ciertos medicamentos. La buena noticia, sin embargo, es que
existen alternativas para casi todos, algo que debe ser coordinado
siempre con el médico.

Dependiendo de lo que te afecte, puedes asesorarte con especialistas.
No creas todo lo que lees en internet. Por supuesto, es importante
saber y ser consciente de qué puede llegar a cambiar con un embarazo.
Si tienes alguna enfermedad reumática, por ejemplo, el cambio
hormonal del embarazo podría disparar alguna afección. No obstante,
los síntomas de la artritis reumática podrían mejorar durante el
embarazo.

Ekkehard Schleusser felicita a las mujeres que deciden tener hijos a
pesar de tener una enfermedad crónica y bendice los avances de la
Medicina. Lo que él hace es motivar a las pacientes a tener en claro
cuanto antes si quieren tener hijos y no demorar en el tiempo la
decisión. “Cuanto antes se planea un embarazo, mejor”, explica. Con
la edad las enfermedades pueden ser más severas o exigir que se
contemplen los riesgos propios del paso del tiempo.