Charlotte (NC), 29 sep (EFE)


La Legislatura estatal de Carolina del Norte aprobó hoy la legislación que restringe los documentos aceptados para identificación en Carolina del Norte y determinó enviarla al gobernador republicano Pat McCrory para que la firme y la convierta en ley del estado.




La Cámara de Representantes ratificó la legislación HB 318 que representa un fuerte revés para las organizaciones a favor de los inmigrantes indocumentados por 70 votos a favor y 43 en contra.

La legislación, aprobada también ayer por el Senado estatal, veta la matrícula consular mexicana y demás documentos expedidos por consulados extranjeros como identificaciones validas el estado, y prohíbe el establecimiento de las ciudades santuario.

Además prohíbe la emisión de identificaciones municipales, de entidades de gobierno (incluyendo las de agencias de la ley), y de organizaciones independientes para que sean utilizadas como prueba de identidad legitima ante los oficiales de policía y otras autoridades.

La medida deja sin efecto los pactos entre departamentos de policía y entidades comunitarias de reconocer identificaciones independientes en al menos cinco localidades del estado.

En Carolina del Norte hay 340 mil indocumentados que necesitan identificaciones con fotografía para no ser arrestados por la policía.

No obstante, la nueva legislación mantiene al pasaporte como un documento válido de identificación en el estado.

La HB 318 es explícita en ordenar que ningún condado de Carolina del Norte podrá poner en efecto medidas locales que restrinjan la aplicación de las leyes federales de inmigración, y veta que las agencias policiales localidades no compartan información sobre los indocumentados con las autoridades federales.

La legislación obliga a que los contratistas y los subcontratistas del estado se sometan al sistema E-Verify, que verifica el estatus migratorio de los trabajadores de entidades públicas y empresas privadas.

El consulado mexicano en Raleigh informó que continuará expidiendo las matrículas consulares a sus connacionales, dado que se trata de un registro de sus ciudadanos radicados en el extranjero, como lo hacen otros países.

El cónsul mexicano en Carolina del Norte Javier Díaz de León explicó que «la matrícula no confiere ningún tipo de estatus migratorio» en Estados Unidos.