Aunque Neverland se encontraba en venta desde 2015, las dificultades para colocarlo en el mercado obligaron a sus propietarios a bajar su precio.
La hacienda, que ha recuperado su antiguo nombre Sycamore Valley Ranch, cuenta con más de mil hectáreas de terreno en el condado de Santa Bárbara.
Tras las últimas remodelaciones, la propiedad dispone de una piscina, pistas de tenis y un cine para cincuenta personas, así como de un lago, una estación de tren diseñada «al estilo Disney» y un establo. Un agente inmobiliario encargado de la venta aseguró a The Hollywood Reporter que el rancho está «impecable», y apuntó que «la única diferencia» respecto a cuando vivía el rey del pop es que apenas quedan animales en la propiedad.
«Hay todavía algunos cerdos y llamas, pero los elefantes ya no están, ni tampoco el tren y el parque de atracciones».
Los herederos de Jackson y la empresa de inversiones Colony Northstar son los actuales propietarios de la hacienda. Michael Jackson adquirió la propiedad en 1988 al magnate de campos de golf William Bone por 17,5 millones de dólares, según unas fuentes, y hasta 30 millones, según otras. Jackson rebautizó el lugar Neverland, el «país de nunca jamás» descrito por el escocés J.M. Barrie en sus novelas sobre unos niños traviesos que nunca crecían cuyo líder era Peter Pan, un personaje heroico que el propio «rey del pop» pretendió emular. Jackson falleció en junio de 2009 a los 50 años y, aunque se especuló con la posibilidad de enterrarlo en Neverland, a modo de santuario como lo es Graceland para Elvis Presley, el artista encontró finalmente sepultura en Los Ángeles.