Miami, 30 ago (EFE).- Florida (EEUU) anotó este domingo 2.583 casos nuevos y 14 muertes más de COVID-19, lo que pone la cuenta de la pandemia desde el 1 de marzo en 621.586 contagiados y 11.273 fallecidos, incluyendo 144 no residentes en el estado.
La tasa de positivos en las pruebas contabilizadas este domingo fue del 5,14 % a nivel estatal y del 6,63 % en Miami-Dade, el epicentro de la enfermedad, que mañana lunes va a dar un nuevo paso en la reapertura económica.
Los casinos van a poder reabrir sus puertas y los restaurantes a servir comidas en el interior del local, aunque con un aforo limitado al 50 %.
Mañana también comienzan las clases en la escuelas públicas de Miami-Dade, por ahora solo de manera virtual debido a la incidencia del coronavirus en este condado del sureste de Florida.


En Miami-Dade se produjeron cuatro de las 14 muertes anunciadas este domingo y 521 de los 2.538 nuevos casos confirmados.
Con esas cifras ya son 156.559 los casos y 2.403 las muertes desde el 1 de marzo en el condado.
Le sigue Broward con 70.950, 186 más que ayer, y 1.183 muertes, y una tasa de positivos del 4,49 %.
Florida es el tercer estado con más casos de COVID-19 acumulados, por detrás de California y Texas, y Miami-Dade, el quinto condado con mayor número de muertes por la enfermedad en el país que lidera la tabla mundial de la Universidad Johns Hopkins, con casi seis millones de contagios y más de 182.000 decesos.


Se espera que en esta semana que entra el gobernador de Florida, Ron DeSantis, anuncie medidas para que los familiares de personas ingresadas en centros y residencias geriátricas puedan visitarlos por primera vez desde marzo.
La nueva página web The Covid Monitor, que informa de los casos de COVID-19 registrados en escuelas de todo el país que han reabierto sus aulas siguiendo una orden del presidente Donald Trump, indica que en Florida ha habido ya 1.364 casos confirmados y 406 pendientes de confirmación.
Estados Unidos alcanzó este sábado la cifra de 5.958.902 casos confirmados de COVID-19 y la de 182.718 fallecidos, de acuerdo con el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.