La líder opositora María Corina Machado aceptó este viernes, con «profunda gratitud», el Premio Nobel de la Paz 2025 «en nombre del pueblo de Venezuela, que -dijo- ha luchado por su libertad con admirable coraje, dignidad, inteligencia y amor».
«A cada venezolano: este premio es tuyo. Es un reconocimiento a lo que hemos logrado juntos y un recordatorio de lo que aún falta. Ahora avanzamos con aún más fuerza, confianza y fe inquebrantable, porque vamos de la mano de Dios hasta el final», expresó la exdiputada en un comunicado.
Machado advirtió que los venezolanos han «sufrido 26 años de violencia y humillación a manos de una tiranía obsesionada con someter a los ciudadanos y quebrar el alma de la nación».
En ese sentido, escribió que «la maquinaria de la opresión ha sido brutal y sistemática, caracterizada por detenciones, torturas, desapariciones forzadas y ejecuciones extrajudiciales que -afirmó- constituyen crímenes de lesa humanidad y terrorismo de Estado».
Sin embargo, prosiguió, la respuesta del pueblo «ha sido firme e indoblegable».
«Hemos forjado un movimiento cívico formidable, superando las barreras que el régimen construyó para dividirnos, y hemos unido a la nación en un anhelo poderoso: paz en libertad. Esta larga travesía ha conllevado costos indescriptibles: miles de vidas entregadas y millones forzados a dejar su tierra. Hoy estamos muy cerca de alcanzar nuestro objetivo», afirmó.
Este premio, según la opositora, es «un impulso único que inyecta energía y confianza en los venezolanos, dentro y fuera del país, para completar» su tarea que, como ya dijo este mismo viernes, es la de «conquistar la libertad» en la nación suramericana.
«Este inmenso respaldo demuestra que la comunidad democrática mundial entiende y comparte nuestra lucha. Es un firme llamado para que la transición a la democracia en Venezuela se concrete de inmediato, tal como lo exigimos contundentemente en la victoria electoral del 28 de julio (de 2024)», indicó, en referencia al reclamado triunfo del opositor Edmundo González Urrutia en las presidenciales celebradas ese día, en las que Nicolás Maduro fue proclamado ganador por el organismo electoral, controlado por funcionarios afines al chavismo.
Machado aseguró que sus connacionales reconocen que el apoyo de «genuinos aliados ha sido decisivo», por lo que expresó su «profundo agradecimiento» a «los pueblos de las Américas y el mundo y a sus valientes líderes» que, aseguró, los respaldan.
«La historia de Venezuela escribirá sus nombres de manera indeleble. Nuestro pueblo entendió que no puede haber paz sin libertad, y que conquistarla y defenderla requiere una enorme fuerza moral, espiritual y física. Venezuela será libre, y este logro propagará coraje y esperanza por todas las Américas, porque la libertad, la democracia y la prosperidad son los pilares que nos unen», agregó.
El Comité Nobel noruego, con sede en Oslo, anunció este viernes que Machado es la ganadora del Nobel de la Paz 2025 «por su incansable labor en la promoción de los derechos democráticos del pueblo venezolano y por su lucha por lograr una transición justa y pacífica de la dictadura a la democracia».
La opositora permanece en la clandestinidad desde su última aparición en público, el pasado 9 de enero, cuando encabezó una protesta en Caracas para defender el reclamado triunfo de González Urrutia, en la víspera de la toma de posesión de Maduro para un tercer mandato consecutivo.