El Paso (TX), 8 jul (EFE).- Un grupo de inmigrantes indocumentados de El Paso y organizaciones a favor de su regularización migratoria expresaron hoy su esperanza de que la decisión de los jueces del tribunal de apelaciones de Nueva Orleans sobre los programas de acción diferida les resulte favorable.
La Red Fronteriza por los Derechos Humanos organizó hoy una conferencia con los medios de comunicación en la que se presentaron testimonios de personas afectadas directamente por el tema.
Durante la conferencia, indocumentados y representantes de organizaciones no gubernamentales dijeron estar esperanzados en que los jueces del Tribunal del Quinto Circuito de Apelaciones votarán el viernes a favor de continuar con los programas que a unos les permiten trabajar de forma legal y a otros seguir con sus estudios.
«Espero que el juez nos apruebe la acción diferida para yo empezar a tramitar mis papeles, mi permiso, para poder trabajar. Yo sé que no voy a poder viajar, pero tan solo con saber que estoy protegida, para mí es algo muy importante», dijo a Efe Mary Jerónimo, de 41 años y originaria del Distrito Federal, México.
Sus tres hijos menores de edad nacieron en el Condado de El Paso, pero por la condición migratoria que ella vive, hasta el momento no han podido conocer ni a sus abuelos ni a sus tíos, que residen en territorio mexicano, aseguró.
El 20 de noviembre de 2014, el presidente Barack Obama anunció la ampliación del programa de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), una iniciativa destinada a proteger a los inmigrantes indocumentados que llegaron de niños al país.
Asimismo, también anunció que su administración no deportaría a ciertos padres indocumentados de ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes legales, bajo el nuevo programa de Acción Diferida para la Responsabilidad de los Padres (DAPA).
La aplicación de estas iniciativas, que podrían beneficiar a cerca de cinco millones de personas, fue bloqueada temporalmente en febrero por un tribunal texano que aceptó una demanda presentada por 26 estados liderados por Texas, y que ahora ha llegado al tribunal de apelaciones de Nueva Orleans.
Fernando García, director ejecutivo de la Red Fronteriza por los Derechos Humanos, dijo estar confiado en que pese a que los jueces son considerados «conservadores» su decisión va a tender a respaldar la autoridad del presidente Obama.
«Van a escuchar nuevos testimonios y deliberar nuevamente. Nosotros realmente estamos esperando que la corte decida a favor de la autoridad del presidente», aseguró a Efe.
Dijo que esta deliberación de la corte tiene repercusiones más allá a los asuntos migratorios, debido a que lo que se pondrá en tela de juicio es si el presidente tiene la autoridad para tomar decisiones ejecutivas.
García recordó que otros presidentes han recurrido a las medidas ejecutivas en cuestiones migratorias, lo que «se ha sentado un precedente», por lo que previó que el tribunal «le va a dar la razón al presidente».
Si el viernes los jueces reafirman la suspensión de esos programas, se espera que la demanda llegue al Tribunal Supremo federal.
En la conferencia de hoy participaron el senador estatal José Rodríguez y representantes de varias organizaciones comunitarias de El Paso.
Los indocumentados y las organizaciones que apoyan la inclusión de sus beneficios responsabilizan al gobernador Greg Abbott y a los republicanos de que los programas se encuentren suspendidos.
La Alianza por una Reforma Migratoria para Texas (RITA) ha organizado eventos esta semana en Houston, Brownsville, Arlington, Austin y El Paso para mostrar su apoyo a la aplicación de estos programas.
EFE