ARCHIVO - Los cobayos aman atravesar pequeños túneles. Foto: Andrea Warnecke/dpa

 

¿Todo el día sentado en la jaula? ¡Pero qué aburrido! Por suerte, es fácil motivar a los cobayos a realizar movimientos mediante comidas que les gustan.

Según recomienda la revista alemana «Ein Herz für Tiere» (un corazón para los animales) en su edición de mayo de este año, lo mejor es que sus dueños le armen a la mascota un pequeño circuito de fitness.

Mediante cartones o paneles de madera cuadrada puede construirse una escalera estable para subidas y bajadas. Esta sirve como un obstáculo, al que se pueden sumar diversos túneles hechos de grandes rollos de cartón.

Y quien además ate entonces un trozo de manzana a un cordel y lo vaya tirando a lo largo del recorrido delante del cobayo, lo pondrá verdaderamente en actividad.

Con pequeñas «golosinas» de este tipo, los propietarios pueden guiar a los animalitos por encima de los obstáculos y a través de los pasos subterráneos. Quien tenga aún mayores ambiciones, puede añadir más elementos, como un balancín o subibaja.

Algunos cobayos prefieren más bien la búsqueda de «premios» en un laberinto. Este puede ser construido mediante libros o cubos apilables, en cuyo centro el dueño colocará la recompensa para su mascota.

dpa